La vanguardia suele comprenderse como aquella tendencia que anticipa lo que vendrá... más nueva que lo nuevo, tan nueva que aún no ha llegado. Idea de origen militar, la vanguardia proviene del léxico combatiente que designa a la parte más adelantada del ejército, la que forma la «primera línea» de avanzada, la encargada de la exploración antes, incluso del primer combate. Si bien el vanguardista es tomado como aquel capaz de imponer nuevas tendencias, la idea de vanguardia fue edulcorándose y perdiendo densidad con los años. Como aquel general estratega que plantea ciertas batallas, cuyo objetivo está más vinculado a calmar las ansias de venganza o resolver un problema político interno, que de conquista o de defensa, así como aquellas batallas puntuales que sirven para descomprimir el clima y evitar la guerra. En los últimos años se denomina "vanguardia" más a una válvula de escape que a un espíritu aguerrido de cambio.